Guanajuato, México: realidades de la administración del agua

En el centro de México se encuentra la región de Guanajuato. Esta área que cuenta con un fuerte desarrollo agroindustrial, presenta diferentes desafíos frente al manejo de los recursos hídricos y las condiciones de acceso a los mismos de quienes viven en el sector, desde las comunidades rurales, hasta las grandes empresas exportadoras de productos como el aguacate.

En Guanajuato las aguas superficiales que se encuentra en los ríos, lagos o arroyos, están comprometidas como consecuencia de la sobreexplotación agroindustrial. Más del 95% se utiliza en los grandes distritos de riego que hay en Guanajuato y solo una mínima parte se usa para el consumo de las comunidades en sus hogares. El abastecimiento de agua para las personas no se da con aguas superficiales, sino con agua de pozo.

Organización comunitaria para la correcta distribución de los recursos

A pesar de la existencia de entes gubernamentales encargados de velar por una explotación de los recursos para el beneficio de todos, la realidad es que la brecha aún es grande y se requiere del apoyo de todos para generar un cambio profundo frente a este desafío. Debido a esta situación, muchas comunidades han decidido organizarse para buscar e implementar soluciones, tales como la gestión de la ampliación de los sistemas de acueducto y alcantarillado que se han quedado obsoletos o cortos para la prestación de los servicios. 

Para consolidar el logro de una ampliación de las infraestructuras, las comunidades deben hacer un esfuerzo organizativo y pedagógico para garantizar la sostenibilidad del servicio, ya que solo la mejora estructural es apenas el comienzo del trabajo. La administración de los nuevos sistemas, ahora también a cargo de las comunidades, presenta retos de manejo de dineros y establecimiento de tarifas, así como un reglamento para el correcto uso del agua potable para consumo humano.

La importancia de los Comités de Agua y la igualdad de género 

El trabajo de los Comités de Agua es crucial porque son ellos los que toman las decisiones sobre el uso y administración del agua. Tradicionalmente todo este trabajo organizativo lo hacían los hombres, pero esta situación ha empezado a cambiar y las mujeres cada vez juegan un papel más importante en estos espacios de decisión.

Las mujeres tienen una relación muy directa con el agua en el hogar. Según la Unicef, en Latinoamérica, las mujeres pasan más tiempo diario buscando agua, hirviéndola para beber, cocinar, bañar a los niños, limpiar la casa o lavar la ropa que en lugar de ir a la universidad, a trabajar o a descansar. Así mismo, según expertos del Banco Interamericano de Desarrollo, la falta de agua incrementa la desigualdad de género. 

En este episodio se revela un reto que no solo tiene que ver con la falta de acceso a agua, sino con la inequidad en su uso, evidenciando también un desequilibrio en la participación de hombres y mujeres en la gestión de los servicios de agua y saneamiento. Sin embargo, participantes del Proyecto Guanajuato, protagonistas de este capítulo, también hablan de cómo están transformando realidades. Poco a poco, la comunidad genera una nueva etapa en la que se apropia de sus sistemas de agua, identificando la mejor manera para organizarse y gestionarlos sosteniblemente. En el proceso, mujeres guanajuatenses se abren un espacio y, empoderadas, alegres y creativas, también lideran la movilización de sus comunidades.